martes, noviembre 27, 2007

La ciudad va contigo (estés donde estés)

Ando por una ciudad nebulosa, hecha de sueños y árboles de pesadillas. El polvo es de metal, sabe ácido y hace que tu piel enrojezca hasta que se llena de ronchas color escarlata.

La gente es siempre la misma, vayas donde vayas. Mientras tú sigas igual, nada va a cambiar.

¿Dónde dejaste tus sueños de porcelana?

Se hicieron trizas al caer junto con tus deseos de niño. ¿Qué fue de ellos? ¿Aún los recuerdas?

1 comentario:

Frozen dijo...

Nadie debería morder el polvo, las ronchas son molestas y hacen que te concentres más en rascarte que en sonreir.

Así es imposible soñar.